Trabajada victoria. Mosqueos y Mena andando

Jugamos para divertirnos. Quizás convenga recordar este axioma de aquí al final de la temporada. El CB Qalat consiguió una trabajada victoria ante el Maxialjarafe cuyo resultado final, 42-62, no refleja los apuros y la tensión que se vivió a lo largo de gran parte del choque. Con este triunfo los panaderos llegan al tramo final de la temporada regular con  opciones de meterse en la Final Four. El equipo ganó, pero los jugadores no se divirtieron. Eso tiene que cambiar.

Tras un comienzo dubitativo y un parcial de 8-3 de los locales, CB Qalat fue, poco a poco, haciéndose con el mando del partido hasta ganar el primer cuarto por 11-15. Sin embargo, el segundo cuarto estuvo muy igualado y a mitad de partido las cosas estaban como al principio. El Maxialjarafe cargaba su juego en Juanma Tomares y solo IU era capaz de detenerle... mientras sus pulmones se lo permitían. Pero comenzaron a llegar las ayudas (hasta tres jugadores se cerraban para frenar al center aljarafeño) y las cosas funcionaron en defensa.

Y llegó el temido tercer cuarto. Cualquier cosa podía pasar. Y pasaron cosas buenas. Juago rápido, buena defensa y paciencia para atacar una zona relajada hicieron posible el despegue en el marcador. Parcial de 7-18 y Mena Bernal anotando puntos a placer... y sin correr. ¡Miento! Corrió una vez y cuando le llegó la pelota no sabía donde estaba la canasta y terminó tirando de espaldas. Quitando eso, se jartó de meterlas andandito. Hasta forzó una falta del tebeo.

Quedaba un cuarto. 16 puntos arriba así que se trataba de disfrutar, de aguantar los dos primeros minutos y ya está. Pero eso no podía pasar. Tiros precipitados, pérdidas de balón, malas defensas, la gente que se pone nerviosa y comienzan los gritos, las malas caras y el mal rollete. tiempo muerto, cambios y asunto arreglado en el campo. Pero no en las cabezas. Con un parcial de 3-14 en los últimos 3 minutos el CB Qalat dejó el marcador donde siempre debió estar.

Pasado el trance toca reflexionar sobre lo que le pasa al equipo cuando las cosas no funcionan. No puede haber tanto nervio tanta mala cara y tantos gritos. Todos tienen que reflexionar sobre sus roles y sobre lo que se puede y no se puede decir.

Quedan pocos partidos y con las nuevas normas de competición en la que los cuatro primeros se clasifican directamente a las semifinales, se hace imprescindible ganar todos los partidos para conseguir esa marca. De momento la próxima jornada es de descanso. Momento ideal para pachanguear.

Al menos, ganar

Cuando no se puede jugar bien, hay que ganar. Es lo único positivo que se puede sacar de un partido casi para olvidar. No son excusas la pírrica comparecencia de los integrantes de la plantilla (6 hombres), ni que la mitad de ellos llegaran pitados ya los tres minutos, ni la descompensación (cuatro pivots, un base... y el legal, que es basescoltaleropivot). Olivares, un equipo con muy poco, puso contra las cuerdas al equipo panadero, que ganó al final por diez puntos y que suma su segunda victoria a domicilio pero que tendrá que mejorar muy mucho si quiere hacer algo importante en esta liga.

A las ya sabidas ausencias de Chikichanka, Pitu y Enrique se sumaron a última hora las de IU Van Horn y Tomi Diaz. Lo que dejó mermada la convocatoria desde el primer momento. Era un día para correr, pero con 6 hombres fue imposible hasta el último cuarto en el que un par de contraataques y un triple (al fin9 de Legal, rompieron el partido a falta de tres minutos.

Problemas en el tiro

Olivares defendía con una zona que era, digámoslo en términos suaves, relajada en la parte superior. Dejaban tirar más allá de lo obsceno... Pues bien: Chicho aportó una penosa serie de 2 de 8 en tiros de tres y ;Legal 1 de 7. El equipo echó de menos a Chikichanka pero sobre todo faltaron las manos de Pitu del MVP de la liga en la jornada 1, Enrique. Hubo que forzar los pases interiores pero no fue el mejor día de Totti y la Bomba Gallego estaba pensando más en  el color de los patucos que tendrá que comprar en 8 meses que en cortar por en medio de la zona y hacer tiros cómodos de dos metros, que era a lo que invitaba la defensa contraria.

Y hablando de defensa. Ante la escasa presencia de banquillo (apuntada una y otra vez por el equipo contrario que gritaba: "¡hay que correr, carajo, que sólo tienen a uno ahí sentao" ante las risas socarronas de la Bomba) la consigna era no cargarse de faltas. Así que los jugadores siguieron al pie de la letra lo dicho y la zona propia era una autovía de tres carriles. Si a eso sumamos que su jugador franquicia (el 15) metía esos triples que ya hemos sufrido (verdad Kuki?) en otras ocasiones pues así iba el resultado: Ventajas cortas por parte de ambos equipos durante los tres primeros cuatros.

Fue muy al final cuando el equipo dio un paso adelante y subió la intensidad defensiva, legal secó al 15 con una defensa ciega (y porculera) para poder correr un poco y anotar un par de contraataques, hasta que llegó el tripe de Legal, que ponía una ventaja ya insalvable.

 

Para la reflexión queda que:

cuando no se juega bien al menos hay que ganar

Que no nos divertimos y eso no mola.

Que mejor que no viniera el IU porque el arbitraje fue condescendiente con la defensa rival y eso no habría gustado al Colorado del Alcor

Que la línea de tres está muy lejos.

Que en Camas se come regular (la salsa del serranito aún se me repite)

Que hay que llegar un poquito antes

Que hay que llegar.

Que se mejore la suegra de Tomi

Que el miércoles a lo mejor jugamos contra los totis y así nos hinchan.

Doctor:¿Por qué hemos perdido?

Si el deporte es un estado de ánimo, el CB Qalat de la Maxi necesita un psicólogo. Los panaderos tendrían que sentarse en el diván y preguntarse al más estilo Mourinho: ¿Por qué? ¿Qué fue lo que pasó para que se escapara un partido sin ruido? Queda mucho, queda todo. Esta derrota puede ser una anécdota o una rémora y sólo el tiempo la pondrá en una o en otra estantería. El CB Qalat Maxiliga perdió por 5 puntos  en su segundo partido de liga ante Maristas, un equipo nuevo en la competición lleno de jugadores que no lo son. Gente en su mayoría venida de otros equipos que han completado un equipo muy decente que sin embargo debió haber sucumbido en el coqueto pabellón Albero.

¿Por qué?

¿Serían los tiros libres?

Puede ser. Qalat metió 3 de 12 en el último cuarto y Maristas 9 de 12. Una diferencia de + 6 para los colegiales.

¿El balón de juego?

Aquí el psicólogo tendría mucho que decir. La primera parte se jugó con un balón y la segunda con otro, que no gustaba lanada al peculiar jugador Chuchín, que se quejó amargamente del cambio durante el tercer y el cuarto cuarto y de la bajada en los porcentajes de tiro.

¿La culpa fue de los árbitros?

Maristas se empleó a fondo y repartió estopa (Pitu salió lesionado), sobretodo bajo los aros en la presión al hombre con balón y los árbitros dejaron jugar más de lo aconsejable. También pitaron una cantidad innecesaria de faltas en ataque en los rebotes ofensivos de Qalat.

¿Fue el escaso acierto en el tiro exterior?

¿Será que faltaba el MVP de la semana pasada?

¿Será que echamos de menos a Juanma Kevin Love?

¿Hay que buscar la razón de la derrota en que ...?

Señor psicólogo, por favor, ayúdenos.

Probablemente fue un poco de todo. Y aún así, el partido estuvo ahí, en una escasa diferencia y con aspectos positivos:

- No bajar los brazos cuando se está por detrás en el marcador y queda poco tiempo.

- Jugar dentro y sacar el balón fuera para invertir el juego.

- Gallego se cambió en medio de la pista.

- Toti mejora.

- Chicho también (aunque cada vez es mejor entrenador y peor jugador)

- Hay agua caliente.

- Hemos cambiado La Vía.

- No le pitaron técnica al IU.

- Chuchín no hizo aspavientos.

- Vino Legal.

- Manolo sigue sin poder jugar.

- No ha habido goteras.
- Hay luz en las dos zonas...
Hay que mirar adelante. No pasa nada.
 

Chuchin se echa atrás y firma con el CB Qalat tras una semana loca

"Soy un chiquichanca" Con estas duras palabras se autodefinía ayer noche el díscolo jugador alcalareño, Chuchín Rodríguez, tras una semana turbulenta que ha terminado de manera feliz para todos. El escolta alcalareño hacía estas declaraciones tras firmar su nuevo contrato con el CB Qalat que le une una temporada más al equipo de la Maxi. Era el final de un conflicto que comenzó en el último partido preparatorio que hizo pensar a casi todos que el talentoso tirador no jugaría en Alcalá. Una negociación in extremis de Chicho le hizo cambiar de opinión, aunque el resquemor ha quedado latente, según sus declaraciones a la salida del restaurante donde cenaba la plantilla tras el último entrenamiento.

Chuchín había asegurado que esta temporada no iba a jugar por discrepancias en la manera de jugar que tiene el equipo, una semana antes. Una noticia que dejaba al CB Qalat Maxiliga muy escaso de efectivos en el perímetro. así se lo hizo ver Chicho en las negociaciones. Esa y alguna contraprestación indeterminada ha hecho cambiar de opinión al jugador, que salió en rueda de prensa para anunciar que reconsideraba su decisión anterior y que se mostraba dispuesto a firmar, aunque para sí queda el numerito esperpéntico de la semana pasada.

Pero como bien está lo que bien acaba, el lunes que viene la plantilla alcalareña contará con el Djorjevic del Guadaira cuando comience la ruda de calentamiento en el Andrés Jiménez de Carmona en la primera jornada de una liga que se presenta apasionante.

 

Una pretemporada movida (no de coches)

La pretemporada del CB Qalat Maxiliga ha estado llena de contratiempos que han hecho pensar incluso en la desaparición de un conjunto que el año pasado logró meterse en la Final Four y que, tras su discreta actuación, ha acusado la baja de diferentes jugadores. Lesiones de diversa índole, traspasos de jugadores e intentos de desestabilización por parte de clubes rivales han sido la tónica de una pretemporada que ya toca a su fin.

Jugadores como Juanma Kevin Love, traspasado a un equipo canadiense, o las bajas de IU y Alba, que este año han pasado a la reserva activa dejaban al equipo mermado. A eso hay que añadir las lesiones de Chicho y Darío, que no han podido entrenarse apenas con sus compañeros.

Pero el auténtico culebrón del verano ha sido el posible fichaje de Toti por el equipo que lleva su nombre. Una oferta fuera de mercado hizo dudar al maestro, que vivió jornadas de angustia. Finalmente, en una negociación relámpago, renovó con el CB Qalat, que le ha prometido minutos de calidad a un jugador que el año pasado fue de menos a más y que en esta temporada está llamado a ser una referencia.